Liane dePougy fue bailarina, cortesana, escritora, princesa y monja. Una de las mujeres más famosas y provocadoras de la Belle Époque, coleccionó amantes, joyas y casas, y finalmente decidió tomar los hábitos de la Orden de Las Dominicas con el nombre de Ana María de la Penitencia.
Anne Marie Chassaigne (1869-1950) se educó en un estricto pensionado religioso de provincias. Su padre era de origen bretón y su madre española. Se casó con un joven miliar, amigo de la familia, a los dieciséis años, y tuvo un hijo, Marc Pourpe, futuro héroe de la aviación francesa abatido en la I Guerra Mundial. Un día, harta del maltrato de su marido, decidió huir a París abandonando a su marido y su hijo.
Allí bajo la protección de la Demi-Mondaine (bailarina con protectores ricos) Valtesse de La Bigne comienza a trabajar en el Folies Bergere, donde pronto se convierte en una estrella rivalizando con La Bella Otero y Emilienne d'Alençon, las divas del Music Hall parisino. Entre los amantes de Liane se citan banqueros, políticos, aristócratas e incluso el entonces Príncipe de Gales. En esta lista, de hombres y mujeres, figura el escritor Gabrielle D'Annunio. La bailarina adquiere una mansión en París, casas de recreo en Bretaña y Niza, e inicia una importante colección de arte, joyas y antigüedades.
Cuentan que Liane intentó desacreditar a su rival, La Bella Otero, que siempre iba muy enjoyada para lucir los regalos de sus protectores, y para ello acudió al teatro sin una sola joya, más que su belleza, y con una doncella tras ella que portaba toda su colección.
Comienza a escribir novelas que tienen un gran éxito entre el público. Una de sus obras más conocidas es Idilio Saphique en la que aborda su relación con la joven escritora norteamericana Natalie Clifford-Barney. Una relación que escandalizó a la sociedad de la época porque ambas mujeres mostraban sus pasión públicamente. A la rica y caprichosa Natalie la sustituyó en su corazón y en su cama el príncipe rumano Georges Ghika, más joven que Liane, y cuya familia se opuso a la relación.
Ambos se casaron en 1910, y el matrimonio duró hasta que en un ataque de fe la entonces Princesa Ghika decidió separarse para tomar los hábitos de la Orden Terciaria de las Dominicas con el nombre de Ana María de la Penitencia. Encerrada en el convento dedicada a la oración y la reflexión pasó sus últimos años.
3 comentarios:
Muy variada la vida de esta mujer. Debió pasarlo tan bien que al final necesitó recluirse y alejarse de todo.
Interesante
Ana
Na idade posterior certas coisas não nos deixam, por assim dizer, muito felizes.
Teu passado é o teu presente...e o teu presente é o teu futuro...
Vaya con la señora. Tocó todos los palos. Jajajaja
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