HEDY LAMARR

"Cualquier chica puede ser glamourosa. Lo único que tienes que hacer es quedarte quieta y parecer estúpida"

Hedwig Eva María Kiesler nació en Viena en 1913, su padre era un banquero y su madre una pianista de origen judío. Desde pequeña destacó por su inteligencia, sus profesores la consideraban una superdotada, y a los dieciséis años inició estudios de ingeniería. Pero Hedwig poseía una vena artística que le hizo cambiar la ingeniería por la Escuela de Arte Dramático de Berlín. Pronto comenzó a trabajar en el teatro con Max Reinhardt.

 En 1932 filma Éxtasis de Gustav Machaty en la que aparece desnuda y recrea un orgasmo, lo que provoca que la cinta se convierta en una película moralmente indecente y sea prohibida en varios países. Tal vez por todos estos factores la película fue un éxito y todas las miradas se dirigen a la bella protagonista. Sus padres deciden casarla contra su voluntad con un fabricante de armas Fritz Mandl que la somete a la esclavitud y la exhibe como un trofeo. Frtiz emprende una cruzada intentando comprar todas las copias de Éxtasis para destruirlas, aunque no lo logra. Ella aprovecha estos años de reclusión marital para proseguir sus estudios de ingeniería y sonsacar los pormenores de tecnología armamentística a los amigos y clientes de su marido. Unos secretos que posteriormente contará a las autoridades norteamericanas.

Tras varios intentos consigue huir de su marido escapando primero a París donde se da cuenta de que le siguen los guardaspaldas de Fritz, saltando a Londres y finalmente aterrizando en Hollywood donde es acogida bajo la protección de Louis B de Mille de la Metro Goldwyn Mayer. Ambos deciden cambiar el nombre de la actriz que toma el apellido de la bellísima actriz de los años veinte, Barbara Lamarr, y así nace Hedy Lamarr.

Comienza una carrera marcada por su belleza. Quizás no supo escoger sus papeles, desechando películas como Luz de Gas y Casablanca y participando en títulos que la encasillaron en la mujer misteriosa, a veces pérfida, sensual y bella. Lady of Tropics, Cenizas de amor de King Vidor,  Fruto Dorado con Glark Gable y Sprencer Tracy, o la versión de Cecil B. de Mille de Sansón y Dalida, fueron algunos de sus éxitos. Se retiró en 1958 aunque en 1990 intervino en una película. Destacó en el gran melodrama y las películas de aventuras, pero no fue muy reconocida por su talento interpretativo, y siempre será recordada por su belleza.

Su rencor a  los nazis le hizo patentar diversos inventos relacionados con nuevas tecnologías militares como una técnica de modulación de señales en espectro expandido que se empleo para construir torpedos teledirigidos por radio que fueran imposibles de detectar por el enemigo. La autoría de estas patentes fue desconocida durante mucho tiempo porque ella las firmó con su apellido de casada. Debido a esto el reconocimiento por su contribución a la causa aliada y su talento como investigadora le llegó muy tarde.

Se casó seis veces, tuvo varios hijos y adoptó uno, y de los hombres de su vida decía "Tengo que dejar de casarme con hombre que se sientan inferiores a mí. En algún lugar

debe haber un hombre que pueda casarse conmigo sin sentirse inferior. Necesito un hombre inferior superior".

Fue detenida en varias ocasiones por su cleptomanía porque no necesitaba robar, era millonaria. Al final se reconoció su contribución a la ciencia y a la Guerra en favor de los aliados. Murió en su casa de Florida en2000

Hace poco volví a ver La extraña mujer de Edgar G. Ulmer una película de 1946 en la que Hedy Lamarr es una mujer manipuladora que consigue todo lo que se propone gracias a su belleza y a su inteligencia. Una película muy oscura que se desarrolla en un pequeña ciudad puritana.  Hedy Lamarr está arrebatadora, inteligente, con una mirada que puede ser gélida o cálida, no creo que fuese una actriz limitada, tal vez no tuvo suerte con los papeles. En esta película Lamarr me ha recordado mucho a Vivien Leight.