Lolina Café en Malasaña

La verdad es que cada vez me gusta más este barrio de Madrid. Han abierto cantidad de sitios monos donde se puede comer a cualquier hora en locales muy monos. El domingo volví al Lolina Vintage Store Café para tomarme uno de sus maravillosos zumos naturales. Al final decidimos comer algo y la verdad nos gustó mucho. Tomamos un perrito caliente con hummus que estaba buenísimo y una tosta de jamón con salmorejo. El lugar con ventanales abiertos a la calle está decorado con muebles y lámparas de los años 70, tiene dos plantas aunque lo bueno es sentarte en la primera porque ves toda la actividad de la calle Espíritu Santo.

En la misma calle y con el mismo estilo han abierto una pastelería-café Have a nice day cuyos esaparates fotografía todo el mundo por el colorido de sus dulces.