Sirenas

Las sirenas están presentes desde tiempos inmemoriales en la literatura, el arte y las narraciones de griegos, celtas o escandinavos. Estos seres fabulosos, mitad mujeres y mitad peces, han sido protagonistas de una mitología que unas veces las pintaba como malvadas capaces de atraer y perder a los pobres marineros con sus bellos cánticos o mujeres sabias que ayudaban con sus conocimientos a los pobres náufragos.

Los celtas creían que ellas podían decidir convertirse en humanas, es decir tener piernas, con sólo desearlo. Contaban que las sirenas aparecían en las fiestas de los pueblos para danzar y cantar y sólo se las reconocía porque llevaban el bajo de sus vestidos mojado. Los griegos por el contrario las veían como una amenaza y para ellos eran una mezcla de mujer y de ave que gustaban de comer carne humana. Atraían a los marineros griegos con sus bellos cantos y una vez a su merced los devoraban. Así son descritas en las aventuras de Ulises y Jasón y los Argonautas.

Para los nórdicos las sirenas son buenas y tienen grandes conocimientos de botánica y el don de la profecía. Las sirenas también aparecen en Las mil y una noches donde se habla de "maravillosas criaturas de largos cabellos ondulados como las olas". La fascinación por las sirenas sigue presente en nuestros días. La sirenita del danés Hans Christian Andersen se ha llevado al cine y es el símbolo de Copenagur. Hoy en día las sirenas inspiran a pintores, diseñadores y artesanos. Buceando por ahí he encontrado bolsos, pulseras.. con sirenas.